Los inversores se dividen entre quienes hace una inversión a largo plazo y a corto plazo. ¿Pero cuáles son sus diferencias al momento de invertir?

¿Cuáles son las diferencias entre un inversión a largo plazo y a corto plazo?

Podríamos decir a grandes rasgos que en el mismo titular se encuentran la principal diferenciación de estos dos estilos de inversión. La inversión a largo plazo tiene un horizonte de inversión por más de un año, mientras que la inversión a corto plazo se reduce a menos de un año. ¿Pero cuáles son las otras diferencias?

¿Hacia dónde apunto mi inversión?

La temporalidad determinará hacia donde debéis apuntar vuestra inversión. Si lo hacéis en el largo plazo, vuestra inversión será en valor. Es decir que vuestra expectativa se centrará en el valor que podría aportar. Todos conoceréis el dicho, “precio es lo que paga, valor es lo que compra”. Vosotros esperaréis en la revalorización del activo.

Mientras que en el corto plazo el foco se centrará en el precio. Es decir que vuestro análisis se centrará en el valor del activo en un periodo corto de tiempo. Aquí analizaréis concretamente la evolución del mismo para aprovechar las oportunidades al alza o a la baja. Esto es prácticamente especular con valor de un activo.

¿En qué análisis debo basarme?

En una inversión a largo plazo el análisis fundamental será la clave para encontrar donde invertir, ya que nos permitirá saber si la empresa brindará o no valor. Si bien los resultados pasados no reflejan los futuros, conocer cómo han ido evolucionando los ingresos de la firma os dará una idea de si la gestión de la firma refleja un aumento o pérdida del valor.

En una inversión a corto plazo el análisis técnico será vuestro mejor aliado. Los indicadores técnicos, figuras chartistas, soportes y resistencias son solo algunos de las herramientas posibles para analizar la evolución del precio. Para realizar un correcto análisis os debéis formar para poder interpretar las diferentes señales de los mismos. Así como saber detectar patrones, soportes y resistencias.

¿En dónde centramos el riesgo?

Cuando hablamos de la inversión a  largo plazo, el riesgo de debe gestionar. Es decir que vamos gestionando nuestras posiciones en base a la situación financiera de las empresas. Por lo que podemos decidir aumentar o reducir la exposición en nuestra cartera.

En el corto plazo la volatilidad será nuestro objetivo. Si bien es necesaria al momento de invertir, saber gestionar nuestras posiciones ante la misma será clave para poder sacar rédito al mercado. ¿Cómo manejamos el riesgo? Estableciendo stop loss y take profit en cada operación que hagamos al mercado. Si eres novato evitar los escenarios de extrema volatilidad.

Pero hay un punto en común entre la inversión a largo plazo y corto plazo

Ambos tipos de inversores tienen el mismo objetivo, ganar dinero. Pero cuando hablamos de ganar siempre debemos pensar en la rentabilidad. Si bien en el largo plazo es algo obvio, en el corto plazo esto no es tenido en cuenta debido a centrar mucho las ganancias en las operaciones individuales y no en su conjunto.

Esto es un error muy común en los inversores novatos que se pierden en las pérdidas, valga la redundancia, y no en la rentabilidad que supone el verdadero objetivo. Por ello es que en esta temporalidad hablamos de hasta 12 meses. La operativa en el mercado puede ser breve, pero los resultados los debéis ver más allá de los minutos u horas que dure la operación.

¿Y tu realizas una inversión a largo plazo o a corto plazo? Cuéntanos tu experiencia en los comentarios, te leemos

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