El pasado lunes hablábamos acerca del Day Trading, hoy toca hablar del otro extremo. Long Trading o trading a largo plazo, hablamos de meses o años.
Long Trading: Operar en el largo plazo
Siempre estará la eterna discusión sobre que es mejor, en cortos o largos periodos de tiempo. Todo dependerá de tu estilo de trading. El Long Trading te ofrece la posibilidad de invertir en un activo en el largo plazo, es decir que no te tendrás que preocupar demasiado ya que la idea es mantener la posición en la mayor cantidad de tiempo posible para alcanzar tu objetivo.
Cuando hablamos de largo plazo nos referimos más bien a una cartera de inversión, aunque también lo podrías aplicar a otros activos.
Un punto principal será el capital disponible, en esta modalidad no puedes pensar en 1000 o 10000 euros, sino en mucho más. Porque será una cantidad importante de obstáculos que deberás enfrentar con pie de plomo y sin titubear.
La idea es ir consiguiendo ganancias a lo largo de la posición. Sean pocas o muchas, hayan pérdidas o no. Lo importante es tener bien claro que una caída del precio no será motivo de salir, tu único objetivo será la rentabilidad establecida previamente.
En esta modalidad hacen falta nervios de acero y una mente fría y calculadora, si te asustas al primer cambio no será la operativa más adecuada para tu mente y tu capital.
El Long Trading no es para cualquiera.
Hay una serie de puntos que es necesario que tengas en cuenta si te decides a operar de esta forma:
- Pequeño apalancamiento: A diferencia del Day Trading que utilizamos un apalancamiento alto, en este método el mismo debe ser bajo para poder sostener la volatilidad durante el tiempo que mantengas abierta la posición.
- SWAPS: Si vais a mantener posiciones abiertas en tanto tiempo, el broker te cobrará los swaps por las posiciones que se mantienen abiertas durante la noche. Pueden ser positivos o negativos, así que ten en cuenta esto antes de lanzarte en una aventura de largo plazo.
- Tiempo y beneficio: ¿Realmente me valdrá la pena tener abiertas las posiciones durante tanto tiempo?. Recuerda que deberás tener una cantidad importante de dinero con un escaso apalancamiento. Así que analiza si la relación tiempo-inversión valga la pena.
- Control mental: Este es un factor muy pero que muy importante. En el largo plazo las emociones pueden ser nuestro talón de Aquiles, recuerda que una mala noticia o una caída en nuestra inversión no supone el fin del mundo porque no estamos trabajando sobre lo inmediato sino en lo lejano. Nuestra inversión tiene un objetivo, que tus emociones no nublen tu juicio inversor.
El long trading puede ser una gran opción para quien no tiene demasiado tiempo para estar frente al ordenador pero si para realizar un debido análisis diario de la posición abierta. Es decir, no abrimos y dejamos que siga su curso sino que nos tomamos una horas al día para evaluar como va yendo la posición y ejecutando los cambios necesarios para que se mantenga rentable. Aquí no hablamos de especulación sino de una inversión más seria que simplemente buscar una ganancia al mercado.
Como veis, hay modalidades para todos los gustos pero no para todos los públicos. Recuerda siempre evaluar tu disponibilidad de tiempo y capital antes de invertir.