El mercado de valores ofrece un sinfín de oportunidades, entre ellas la inversión inmobiliaria. ¿Pero cuáles son los 3 métodos en los mercados financieros?
¿Cuáles son las tres formas de inversión inmobiliaria en bolsa?
La inversión inmobiliaria es un común denominador en el imaginario inversor en todo el mundo. Comprar varias propiedades y rentarlas es una fuente de ingresos pasivos, ya que no requiere de nuestra completa atención. Pero el mercado de valores también es un espacio para hacerlo a través de tres formas: Acciones. ETFs, REITs y SOCIMIs.
¿Cuáles son las diferencias de inversión inmobiliaria en bienes raíces o bolsa?
La inversión inmobiliaria entre bienes raíces y bolsa tiene ciertas diferencias:
- Inversión inicial: Para invertir en un inmueble físico se requiere de una gran suma de dinero, mientras que en la bolsa no necesitamos tanto capital para invertir en cualquiera de los activos mencionados
- Costes: Las comisiones de las inmobiliarias pueden rondar entre 2% y 5%, mientras que los brokers solo cobran una pequeña inversión por cada transacción
- Liquidez: La liquidez en los mercados inmobiliarios suele ser mucho menor que en la bolsa. Pudiendo llevar meses la transacción en la primera y segundos en la segunda
- Gestión de riesgos: La compra física de una casa, departamento o comercio ofrece exposición a un lugar en particular. Por lo que cualquier inconveniente económico repercute directamente. Pero la inversión en bolsa ofrece una mayor exposición en diferentes mercados, pudiendo diversificar y minimizar los riesgos
- Rentabilidad y apalancamiento: Los mercados financieros hay mostrado una mayor rentabilidad que la compra física. Sin olvidar la posibilidad de apalancar nuestra inversión a través de una pequeña suma de capital inicial
- La compra física siempre ha estado atada a la protección contra la inflación, ya que frena la reducción del poder adquisitivo
¿Cuáles son los tres tipos de inversión?
La inversión inmobiliaria a través de los mercados financieros, como decíamos al principio, consta de tres opciones:
- Acciones
- ETFs
- REITs o SOCIMIs
Los mercados financieros ofrecen un sinfín empresas relacionadas al sector inmobiliario. Con lo cual podemos exponernos al sector. Pero no son solo firmas relacionadas a la compra-venta de inmuebles, también incluye hoteles, resorts, centros comerciales, centros de salud, etc.
Los ETFs o fondos cotizados en bolsa ofrecen una mayor exposición y variedad que si compramos una a una las acciones. En ellos simplemente abrimos una posición que nos vale por varias firmas en un único vehículo financiero.
Los REITs o Real Estate Investment Trusts (SOCIMIs en España) son entidades cotizadas que administran propiedades inmobiliarias para obtener ingresos, lo mismo que una inmobiliaria pero que cotizan en bolsa. Estas pueden ser desde apartamentos, centros de atención médica, hoteles, edificios de oficinas, naves industriales, etc.
Uno de los grandes beneficios es que están obligados a repartir un alto porcentaje de sus ingresos a los inversores a través de dividendos.
¿Cuáles son los riesgos?
La inversión inmobiliaria física tiene los siguientes riesgos:
- Baja liquidez
- Costes futuros como reparaciones, mantenimiento o seguros
- Impuestos
Con respecto a la inversión en bolsa:
- Alta volatilidad
- Mayor estabilidad igual a menor rendimiento
- La inversión por una acción en particular puede ser más costosa que a través de fondos
